Los factores de riesgo psicosocial son aquellos aspectos de la organización, el entorno laboral y las condiciones individuales que pueden afectar la salud...
ISO 45001 frente a las temperaturas elevadas
Las temperaturas elevadas que hemos experimentado este verano han tenido un impacto significativo en el entorno laboral, siendo la peor consecuencia el trágico aumento de muertes en el lugar de trabajo, que se suma a la cifra oficial de más de 2000 personas fallecidas solo en el mes de julio.
Trabajar en estas condiciones se está convirtiendo en una realidad cada vez más común, debido al creciente número de olas de calor durante la época estival, que son tanto más extremas como prolongadas en el tiempo. Por este motivo, es crucial considerar las condiciones climáticas extremas al planificar las labores, asegurando así la protección de la salud de los trabajadores. En resumen, se hace necesario adaptar las operaciones laborales para hacer frente a estas condiciones desafiantes.
Cada año, la Inspección de Trabajo lanza una campaña estival orientada a fortalecer las prácticas seguras en las empresas y a aumentar la vigilancia, lo que puede resultar en acciones sancionadoras. Durante el 2022, esta campaña, fue iniciada a principios de junio con el envío masivo de cartas que contenían medidas preventivas para proteger a los trabajadores expuestos a altas temperaturas, se centró especialmente en sectores como la agricultura, la construcción, la hostelería y la industria.
El estrés térmico producido por las temperaturas elevadas
El estrés térmico causado por el calor representa un riesgo significativo para la salud, ya que nuestro cuerpo necesita funcionar a una temperatura inferior a los 37ºC para mantenerse en condiciones normales. Cuando esta temperatura se supera, pueden producirse daños graves e incluso la muerte, especialmente a partir de los 40.5ºC.
Según la definición del Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST), el estrés térmico por calor se refiere a la carga de calor que los trabajadores acumulan debido a la interacción entre las condiciones ambientales del lugar de trabajo, la actividad física que realizan y la ropa de trabajo que llevan puesta.
En este contexto, los empresarios tienen la obligación de asegurar que los trabajadores no estén expuestos a condiciones ambientales que pongan en peligro su seguridad y salud, según lo establecido por el Real Decreto 486/1996 y la Ley 31/1995 de Prevención de Riesgos Laborales. Para actuar de forma preventiva, es esencial realizar mediciones termohigrométricas en condiciones desfavorables y planificar las tareas más intensivas durante las condiciones climáticas menos extremas.
¿Cómo prevenir el estrés térmico producido por las temperaturas elevadas?
Para prevenir los riesgos derivados del estrés térmico por calor, es fundamental:
1. Conocer los factores de riesgo:
- Factores climáticos, como la exposición a altas temperaturas y humedad relativa, así como la escasa ventilación y la exposición directa al sol.
- Factores relacionados con el tipo de tarea, como realizar trabajos físicos intensos, contar con pausas de recuperación insuficientes y usar ropa de trabajo que impida la evaporación del sudor.
- Factores individuales, como la edad, obesidad, hidratación, consumo de medicamentos o bebidas alcohólicas, género y aclimatación.
2. Conocer las características de los espacios de trabajo:
- En los lugares de trabajo cerrados, se deben mantener ciertos rangos de temperatura y humedad, evitando corrientes de aire que excedan velocidades específicas.
- En entornos al aire libre o en locales que no pueden cerrarse debido a la naturaleza de la actividad, se deben implementar medidas para proteger a los trabajadores de las inclemencias del tiempo.
3. Realizar mediciones de temperatura y humedad en situaciones extremas para evitar el trabajo a temperaturas elevadas.
4. Aplicar acciones preventivas organizativas y operativas específicas:
- Adaptar los ritmos de trabajo y la carga laboral a las condiciones climáticas y a la tolerancia de los trabajadores al calor.
- Modificar procesos de trabajo para reducir la emisión de calor y humedad, así como el esfuerzo físico excesivo.
- Mejorar la ventilación natural y artificial para reducir la temperatura en interiores.
- Establecer áreas de descanso que permitan la hidratación y el descanso adecuados.
5. Sensibilizar a los trabajadores sobre los riesgos de trabajar bajo temperaturas elevadas:
- Informar y formar a los trabajadores sobre los riesgos, efectos y medidas preventivas.
- Capacitarlos para reconocer los primeros síntomas de las afecciones por calor, tanto en ellos mismos como en sus compañeros.
Software HSETools para prevenir riesgos por temperaturas elevadas
En resumen, la prevención efectiva del estrés térmico por calor requiere una comprensión profunda de los riesgos, así como medidas preventivas específicas y una comunicación clara y educativa para garantizar la seguridad y el bienestar de los trabajadores en condiciones laborales extremas.
Por tanto, es fundamental contar con un Sistema de Gestión de Seguridad y Salud en el Trabajo que sea efectivo y eficiente para reducir y prevenir los accidentes laborales. Para mantener tanto la efectividad como la eficiencia de este sistema, podemos aprovechar la automatización a través de herramientas como el Software HSETools. Este software ha sido desarrollado para cumplir con todos los requisitos de la norma ISO 45001, asegurando así resultados sobresalientes en la gestión de seguridad y salud en el entorno laboral.